Bitcoin (BTC) ha vuelto a territorio positivo por primera vez en casi dos meses, acercándose a los $95.000 y revirtiendo una caída anterior del 18%. Con una ganancia del 1,5% en lo que va del año, la criptomoneda líder ahora está superando al Nasdaq 100, que ha bajado más del 7%, aunque todavía está por detrás del aumento del 24% del oro. Este desempeño agrega combustible al debate sobre la identidad de Bitcoin, ya sea oro digital o un activo tecnológico especulativo, con el péndulo ahora inclinándose ligeramente hacia lo primero.
Un análisis reciente de los coeficientes de correlación de 30 días de Bitcoin revela una alineación más fuerte con el oro (0,70) que con el Nasdaq 100 (0,53), reforzando su narrativa de refugio seguro. La semana pasada, BTC subió un 10%, marcando su mejor semana desde mediados de noviembre y señalando un cambio significativo de impulso. El repunte coincide con renovadas preocupaciones sobre el comercio mundial, en particular la decisión de Estados Unidos de elevar los aranceles a las importaciones chinas al 145%, lo que ha interrumpido las cadenas de suministro y provocado incertidumbre económica.
Bitcoin ha recuperado múltiples niveles de resistencia, incluido el promedio móvil exponencial (EMA) de 21 semanas, rompiendo una tendencia bajista a largo plazo. Según el analista de mercado Rekt Capital, BTC ha reflejado el comportamiento de los precios a mediados de 2021, lo que sugiere un potencial alcista si se mantienen los niveles actuales. Aún así, queda cierta precaución. El analista Alan marcó el área de $93,500 como una zona crítica de soporte, advirtiendo de una posible volatilidad si BTC vuelve a caer por debajo de ella.
En respuesta al creciente interés institucional, Coinbase lanzará el Fondo de Rendimiento de Bitcoin (CBYF) el 1 de mayo. Dirigido a inversores no estadounidenses, el fondo tiene como objetivo ofrecer rendimientos anuales sostenibles entre el 4% y el 8% directamente en BTC. Emplea una estrategia conservadora de arbitraje de efectivo y acarreo y evita prácticas riesgosas como los préstamos sin garantía. Con custodios externos y estrictas medidas de cumplimiento, el fondo está diseñado para atraer a inversores institucionales que buscan rendimiento sin comprometer la seguridad.
Aspen Digital ha sembrado el fondo y actuará como su socio de distribución exclusivo en los Emiratos Árabes Unidos y Asia. El lanzamiento de CBYF se produce en medio de un interés más amplio en Bitcoin DeFi, que ha visto crecer el valor total bloqueado de $3.7 mil millones a 5 5.9 mil millones este mes, según DeFiLlama. A diferencia de las plataformas DeFi centradas en el comercio minorista, el producto de Coinbase se dirige a actores institucionales, lo que indica un cambio hacia vehículos de criptoinversión más estructurados.
Analistas como Willy Woo han señalado que los flujos de capital hacia la red de Bitcoin se están acelerando, impulsados tanto por inversores especulativos como a largo plazo. Con el fortalecimiento de los fundamentos, Woo sostiene que el escenario está listo para nuevos máximos históricos. Mientras tanto, en Washington, el segundo mandato de Trump está catalizando una fusión de cripto y finanzas tradicionales, con empresas como Coinbase, Circle y BitGo explorando licencias bancarias estadounidenses en medio de un clima regulatorio más indulgente.
A medida que Bitcoin se reafirma en medio de la tensión geopolítica y las cambiantes mareas económicas, el apetito institucional está creciendo. Con el nuevo fondo de Coinbase, el aumento de las entradas de capital y el renovado entusiasmo minorista, BTC parece estar bien posicionado para una mayor ventaja, lo que podría consolidar su papel como una clase de activo clave en el cambiante panorama financiero mundial.